La pandemia de COVID-19 ha sido un fenómeno sin precedentes que obligó a los países a tomar medidas de diversa índole, para prevenir los contagios, evitar muertes masivas y asegurar el bienestar de su población; algunas de las medidas implementadas han supuesto el empleo de las facultades extraordinarias que las normativas constitucionales de cada país establecen como salvaguardas, en situaciones de grave connotación en la cual esté en riesgo o amenaza latente la vida de las personas que conforman la nación. Sin embargo, la adopción de medidas de esta índole ha estado aparejada en diversos países a situaciones de violaciones a derechos humanos, en contravención a los estándares internacionales que rigen el uso de los denominados poderes de emergencia.
El equipo de investigación de Cristosal brinda monitoreo constante a las violaciones en materia de derechos humanos, para brindar información oportuna y certera sobre las causas y efectos de estas sobre las poblaciones vulneradas. Alimentado por datos provenientes de instituciones Estatales, de sociedad civil y de cooperación internacional, sus publicaciones fortalecen la labor de defensa y promoción de los derechos humanos en el Norte de Centroamérica.